- He vivido equivocado; lástima entenderlo después de muerto - pensó el fantasma de quien en vida había sido Adalberto Flores.
Sentado en un rincón de su propio velorio, hacía un recuento de las personas que lloraban lágrimas de compromiso, de las que habían mandado coronas para figurar, de las que se reían en la cocina mientras tomaban café. Ninguno parecía realmente afligido, excepto el cadete de su empresa, un muchacho joven con el que apenas había cruzado unas palabras. El chico lloraba con verdadera congoja, sin animarse a acercarse al cajón.
- No se merecía lo que le pasó. Una verdadera desgracia - repetía en voz baja mientras sacudía la cabeza, sin que nadie reparara en su presencia.
Si su condición de fantasma se lo hubiera permitido, Adalberto Flores habría tomado la mano del joven para consolarlo.
Mientras sus hijos discutían por el manejo de la empresa, sus empleados sacaban cuentas de quienes pasarían a ocupar los cargos vacantes, su viuda planificaba un viaje consuelo por Europa, esa pobre criatura a la que él había tratado incluso con menosprecio, sufría por su muerte.
Después de un rato, el cadete se levanta de su silla y se acerca al féretro. El fantasmagórico Sr. Flores lo acompaña, conmovido.Sentado en un rincón de su propio velorio, hacía un recuento de las personas que lloraban lágrimas de compromiso, de las que habían mandado coronas para figurar, de las que se reían en la cocina mientras tomaban café. Ninguno parecía realmente afligido, excepto el cadete de su empresa, un muchacho joven con el que apenas había cruzado unas palabras. El chico lloraba con verdadera congoja, sin animarse a acercarse al cajón.
- No se merecía lo que le pasó. Una verdadera desgracia - repetía en voz baja mientras sacudía la cabeza, sin que nadie reparara en su presencia.
Si su condición de fantasma se lo hubiera permitido, Adalberto Flores habría tomado la mano del joven para consolarlo.
Mientras sus hijos discutían por el manejo de la empresa, sus empleados sacaban cuentas de quienes pasarían a ocupar los cargos vacantes, su viuda planificaba un viaje consuelo por Europa, esa pobre criatura a la que él había tratado incluso con menosprecio, sufría por su muerte.
- No te lo merecías. Una verdadera desgracia, viejo hijo de una gran puta. Mirá que venirte a morir en un telo con tu amante.
No, vos, sos capa de capas, yo de palabras escritas sobre papel no entiendo mucho, pero me doy cuenta, hay un tempo,una manera de ir dando dato tras dato para que uno se haga la imagen en la cabeza, algo que me engancha en tus minirelatos y el golpe de gracia al final que cierra el círculo.
ResponderEliminarGenia!!!!
(che, muy serio lo mio,no?)
Mejor hubiera dicho que me gustó un vagón!!!!
Cuando saque el libro de micros, vos lo ilustrás, jajajajaja.
EliminarGRACIAAAAAAAAAAASSSSSSSSS. Siempre me hacés sentir muy bien.
Dicen que Don Adalberto,
ResponderEliminarpor fin yace muerto,
pero menudo entuerto,
porque parece que tenía
el barco en otro puerto.
jaja...
Eliminarun amigo, en el colegio secundario, allá por principio de los setenta, había escrito una canción que decía algo así...
aaayyy... este Adalberto...
que por seguirlo...
... me dejó el culo abiertooo...
parece que los Adalbertos se las traen...
Encima, en la facultad, tuve un compañero que se llamaba Adalberto Flores... y no estoy jodiendo...
ahora en serio... si hay que elegir una forma de morir... cogiendo... no estaría mal... ¿no...???
besos desde Mar del Plata
él
Ato:
EliminarDon Adalberto, el finado
toda la vida fue un choto
y vino a morir parado
(suponemos que no roto).
Morirse en la cama debe estar fantástico para el finadito, pero te la debo ser la mina que lo acompaña!!!!!!
EliminarChe, el Adalberto Flores tuyo ... ¿era buen tipo? :)
Nosdel y Malena, no quiero imaginarme un rigor mortis camero...:-9
Eliminarmalena... lo único que recuerdo del flaco, es el nombre...
Eliminarato... el rigor mortis va a depender del momento de la muerte... no es lo mismo el gesto "durante", que la sonrisa relajada "después"...
besos... ahora, desde cariló...
Ustedes si que la pasan mal, eh! Jajajajajaja.
EliminarDISFRUTEN MUCHO.
hijos de una gran puta:
ResponderEliminarrecemos para que no nos pase...
Alguno se probará nuestro traje cuando todavía estemos tibios. Que no te quepan dudas.
Eliminardebo confesar que esperaba un remate de los suyos, y sí!
ResponderEliminaracá estoy aplaudiendo mientras me rìo a carcajadas!
beso
Su carcajada ya valió la entrada, creame.
EliminarJajaja!!! Ni el cadete le quedó al viejo granuja! Por fin estiró la plata y se fue a joder a otro lado! Excelente, Male! Besos miles!
ResponderEliminarEste viejo capaz que se queda jodiendo por ahí como fantasma. Viste que hay gente con la que nunca se sabe ..... :)
EliminarSe ve que el tipo no la pasaba nada mal. A su fantasma le tocó la peor parte. Ahora entre nos....el cadete...un maleducado jaja. Un beso, amiga.
ResponderEliminarApenas la va a pasar mal por toda la eternidad, o hasta que reencarne en cadete.
EliminarFlojito el cadete, morirse así da gusto, sea amante, esposa o amiga...Un beso.
ResponderEliminarPero el viejo se merecía reventar de otra manera!
EliminarComo nos gustaría que fuera verdad eso que a cada cual le toca lo que merece.
ResponderEliminar¡¡Pero no!! Yo merezco mucho mas.
Mecangueentooloquesemueve.
Yo me merezco más de todo, también (inclusive de lo malo).
Eliminaryo estoy como iralunas, voy leyendo y esperando la estocada de tus remates. No me voy desilusionada
ResponderEliminarQue suerte, Laura. Es un gusto que pases!
EliminarTodos habremos de vivir equivocados for ever. Esa será nuestra ineludible condena
ResponderEliminarNuestro maldito karma.
EliminarQue de seguro era alguna conocida del cadete... o la hermana... o...
ResponderEliminarBuen relato, mantiene el suspenso hasta la última frase.
Saludos
J.
O .....
EliminarGracias, José. Me alegra que te haya gustado.
Muy bueno, ahora el cadete, ¿tenía celos de quién? ¿de él o de la amante?
ResponderEliminarAbarzos totales, hacía rato no pasaba, me alegra haberlo hecho.
Celos no. ENVIDIA TENIA EL CADETE.
Eliminar:)
Pasá cuando quieras. Sos siempre bienvenido.
Mejor muerte para el finado, imposible... jajajaja...... pero la acompañante, cachis que susto!!
ResponderEliminarY qué tenía que ver el cadete??? No sería el acompañante??? Ayyy que me estoy liando.............
Muy divertido!!
Un abrazo!!
El cadete odiaba al viejo (como el resto de los presentes, parece) y le hubiera deseado una muerte un poquito menos grata, jajajaja.
EliminarNo sé por qué, pero morir cogiendo tiene buena prensa. Yo preferiría que sea con un vaso de whisky en la mano, escuchando buena música.
ResponderEliminarComo siempre, muy bueno.
Salud,
Tiene buena prensa, se. Te imaginás que la petite mort sea eterna? Faaaaaaa.
EliminarIgual, yo prefiero no morirme por el momento.
La verdad debe ser muy triste que nadie te eche en falta y la forma de morir parece otra mala jugada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cosecharás tu siembra, como dice el título. Si te morís sin que nadie te eche de menos ..... por algo será.
EliminarJua! Igualmente es la única forma digna de morir. Parece que no se merecía esa muerte. ¿Envidia? Quizá la mención de un cándido creyendo en la justicia. Besos. Muy bueno.
ResponderEliminarLa justicia no existe, parece que ni siquiera la divina. El cadete, un pobre pibe, lo descubrió tempranamente.
Eliminarah! qué alivio! Pensé habías posteado sobre la olvidable novela, jajaa!
ResponderEliminarDe Adalbertos está llena la vida, no? Y sus hijos seguramente terminen de la misma forma, más allá de en que circunstancias mueran, o sea, cuanto me toca? Me acordé, volviendo a las telenovelas, que volvió la señora a la ficción con "La dueña" y con alto rating.. Menos mal no veo tele de aire, aunque antes que Tinelli.
Besos, Male.
Con lo fantasmagórico yo me hubiera ido más para el lado de Doña Flor o Pedro Páramo, que para las telenovelas. La última que vi fue Rosa de Lejos, porque me obligaba mi abuela.
EliminarBesos!
De nuevo por tu casa disfrutando de las cosillas que nos dejas. Siempre un placer.
ResponderEliminarSaludos y buen fin de semana.
Mis "cosillas" y yo te agradecemos, che, la deferencia de pasar por este humilde sitio.
EliminarDisfruto de la sonrisa que se me queda pegada cuando acabo de leer tu micro, Malena y sólo por eso ya he de agradecerte.
ResponderEliminarBuen micro, sin duda.
Un abrazo,
Y yo agradezco tu sonrisa.
ResponderEliminarjajaja... me hiciste reír.... :)
ResponderEliminarDefinitivamente todo lo que nos pasa en la vida tiene un por que todo logra tener un significado aunque aveces nos cueste entender cual es vivamos en erróneas interpretaciones.
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