Se sentó frente al teclado, miró la pantalla en blanco y no supo qué escribir. Entonces escribió que estaba sentada frente al teclado, con la pantalla en blanco y no sabía qué escribir.
El mensaje es que tenía tantas ganas de escribir que fueron más fuertes que no saber qué… decía Picasso que no sabe cuándo llegan las musas, pero cuando lleguen, que lo encuentren trabajando.
Hombre que juega a que es un hombre que juega a que es un hombre que juega.
Besos Male!
(A proposito y sin ni un ápice de originalidad... hace mucho, mucho tiempo que estoy enamorado de tu nombre. Se que algun día se lo pondré a una hija o a una planta en su defecto si la vida se pone en zorra)
Que viene a ser lo mismo que decir... hoy no escribí nada... y, entonces, empiezan las paradojas y las mentiras que no lo son y las verdades a medias y....
Por cierto. Felicidades :)
Besos con plumas.
Pd: Patricia, ya te lo digo yo. Lo conoce y le gusta. Me lo presentó el otro día al Dolina y a su ángel.
Guille: Casi te ganaste un 10 por el comentario! Bueno, está bien. Tenés un diez por el comentario. :)
Daniel: Escribir sin tener nada que decir. Escribir para recordar que seguimos, que remamos ... mal, en círculos ... pero remamos. Quizás algún día las musas lleguen. Vamos a esperarlas.
Su: Cuando sentimos esas tremendas ganas de escribir, hay que hacerlo. A veces las palabras que nos salen son más sabias que nosotros mismos.
Tano: En realidad, Tano, me llamo Mariela. Como también me gustaba mucho, pero mucho, tuve dos varones y no se me da bien con las plantas, creé este blog al sólo efecto de rebautizarme.
Emma: ¡Gracias! Ya estoy volviendo(de a poquito).
Helen: Gracias!
Carmela: Acá estoy. No muy inspirada, pero estoy.
Patricia: Adoro a Dolina! Y El ángel gris es mi antihéroe favorito.
Carlos: Ella leyó que él la leyó y que espera. Ella espera que él espere.
Flor: Pasa en las mejores familias, diría mi abuela. :)
Pato: Esto también es un trocito de su alma. Es silencio disfrazado.
Kum* (já ¿viste que no me olvidé del asterisco?): ¡Es que me inspiré en tu entrada! Por cierto, gracias. Parece que Patricia me adivinó el gusto por Dolina y por el ángel, viste? :) Besos emplumados.
Efa: ¡Qué mejor ficción que la realidad! Prometo volver pronto a imaginar historias.
¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10!
Y el que te hayas sentado, frente al teclado, sin escribir nada, es un pasito, y no tiene nada que ver con olvidar, sino con atesorar los recuerdos y seguir adelante. Un beso.
Malena, quería comentar algo y me di cuenta que no se me ocurre nada, así que te lo digo un punto. En serio, es un gusto pasar por aquí y ver que hasta no sabiendo que escribir lo haces estupendamente. Abrazos
Y a veces querida Malena, las palabras se amontonan tan desordenadamente que tampoco salen. Y se necesita, respirar, cerrar los ojos dejar que reposen en el corazón, donde antes o después terminan por ordenarse. Al menos a mí me pasa. Otro beso
Antiqva: La Señorita C. es sabia, así que le haré caso.
Guille: Niño Guille, pórtese bien o lo llevo a dirección, eh. :)
Claudia: Escribir para mí es un ejercicio que me ayuda a sacar cosas de adentro. Y cuando no hay nada, también ayuda a enfrentar el vacío. La inspiración va y viene, no?
Miralunas: Sentaditas en silencio en el umbral. Yo sé que estás y no sabés cómo ayuda.
Marcelo: Siempre se empieza desde la nada.
Brynhild: Seguir. Primero forzando los pasos, hasta que salga naturalmente. Pero seguir.
Curiyú: Hay que gritarlas y gritarles, perderles el respeto. Que sepan quien manda.
Alejo: Y ahora que lo sabe, también sonríe.
Jou: La realidad es que ella nunca sabe mucho de nada. Ni siquiera cuando parece que sabe.
Kum: Es que vos siempre tenés razón. No lo dudo.
Anita: Y es un gusto recibir tus comentarios. Sabés? A veces la palabra escrita no transmite la calidez que le queremos dar a las palabras. Yo espero que sepas que REALMENTE es un gusto recibirte en los suburbios.
Alice: ¡Gracias! A mi no me conforma mucho, jajajaja.
Carmela: Eso es exactamente lo que me pasa. No es que no tenga nada que decir. Es que no sé por dónde empezar. Por eso .... calma .... hasta que salga algo.
Adivín: ¡Nunca blanco! Llenémoslo de letras, aunque no digan nada. :)
Pablo: Pequeñas satisfacciones. Hay otras más grandes, como la de verte por acá.
Lila: Es un pequeño triunfo. Y hay que saborearlo también. Lo bueno siempre es bueno, aunque no sea grande. Muchas, pero muchas gracias.
Lola: Yo creo que se inspiró el teclado, no yo. :) Gracias y bienvenida, Lola.
Perfecto. Entiendo. Aunque un dramatismo neurótico me invade y me pregunto el maldito para qué, y me agota, y dejo de escribir o, lo que es peor aún, me abandono a la tarea de olvidar hacerlo. Besos.
De a poco Malena. Ya va a ir saliendo. Un beso!
ResponderEliminarQue muestra de sentido práctico.
ResponderEliminarMuy bien.
Besos.
Casi perfecto, un 9;8.
ResponderEliminarEl perfecto y el diez hubieran ido para mi si se me hubiera ocurrido.
Son un "casi" y un 0,2 de envidia verde cochina.
El mensaje es que tenía tantas ganas de escribir que fueron más fuertes que no saber qué… decía Picasso que no sabe cuándo llegan las musas, pero cuando lleguen, que lo encuentren trabajando.
ResponderEliminarUn beso,
D.
Alguna vez he tenido esa sensación con la idea en la cabeza de ¡tengo que escribir algo ya!
ResponderEliminarPoco a poco voy aprendiendo a dejar fluir, que las palabras salgan cuando tengan que salir, no hay prisas, no hay tiempos marcados,...
A por el siguiente logro.
Besitos
Hombre que juega a que es un hombre que juega a que es un hombre que juega.
ResponderEliminarBesos Male!
(A proposito y sin ni un ápice de originalidad... hace mucho, mucho tiempo que estoy enamorado de tu nombre. Se que algun día se lo pondré a una hija o a una planta en su defecto si la vida se pone en zorra)
Yo la espero Señorita, un abrazo(te)
ResponderEliminarSacar oro de la nada es arte puro.
ResponderEliminarBravo.
Com dice Emma, aquí te espero, sin prisas.
ResponderEliminarUn beso grande
ja ja, muy 'dolinesco' Has leído Las crónicas del Ángel Gris? Si no lo has hecho te lo recomiendo, por tu estilo creo que te encantaría.
ResponderEliminarUn abrazo Malena
El leyo que ella Se sentó frente al teclado, miró la pantalla en blanco y no supo qué escribir.
ResponderEliminarEntonces él decidió esperar por ella.
Pasa, Male, pasa. Y el que dice que no, miente (descaradamente).
ResponderEliminarA veces, las mejores cosas salen de lo más simple.
Mil besos :)
P.D: Buena acotación, Carlos!
A todos nos pasa, me parece. Coraje.
ResponderEliminarYa es algo.
ResponderEliminarOtro día además de sentarse y mirar la pantalla en blanco verá cómo sus deditos van tecleando pedazos sueltos del alma.
Besos.
Que viene a ser lo mismo que decir... hoy no escribí nada... y, entonces, empiezan las paradojas y las mentiras que no lo son y las verdades a medias y....
ResponderEliminarPor cierto. Felicidades :)
Besos con plumas.
Pd: Patricia, ya te lo digo yo. Lo conoce y le gusta. Me lo presentó el otro día al Dolina y a su ángel.
los metadiscursos también valen! Cuando pasa eso, andate a la ficción Malena.
ResponderEliminarBesos mujer!
Dany:
ResponderEliminarVa saliendo. Va queriendo.
Toro:
Practicidad ante todo, amigo!
Guille:
Casi te ganaste un 10 por el comentario!
Bueno, está bien. Tenés un diez por el comentario. :)
Daniel:
Escribir sin tener nada que decir. Escribir para recordar que seguimos, que remamos ... mal, en círculos ... pero remamos. Quizás algún día las musas lleguen. Vamos a esperarlas.
Su:
Cuando sentimos esas tremendas ganas de escribir, hay que hacerlo. A veces las palabras que nos salen son más sabias que nosotros mismos.
Tano:
En realidad, Tano, me llamo Mariela. Como también me gustaba mucho, pero mucho, tuve dos varones y no se me da bien con las plantas, creé este blog al sólo efecto de rebautizarme.
Emma:
¡Gracias! Ya estoy volviendo(de a poquito).
Helen:
Gracias!
Carmela:
Acá estoy. No muy inspirada, pero estoy.
Patricia:
Adoro a Dolina! Y El ángel gris es mi antihéroe favorito.
Carlos:
Ella leyó que él la leyó y que espera.
Ella espera que él espere.
Flor:
Pasa en las mejores familias, diría mi abuela. :)
Viejex:
Si, no? Gracias!
Pato:
ResponderEliminarEsto también es un trocito de su alma. Es silencio disfrazado.
Kum* (já ¿viste que no me olvidé del asterisco?):
¡Es que me inspiré en tu entrada!
Por cierto, gracias.
Parece que Patricia me adivinó el gusto por Dolina y por el ángel, viste? :)
Besos emplumados.
Efa:
¡Qué mejor ficción que la realidad! Prometo volver pronto a imaginar historias.
Amiga, me dijo la señorita C. que debes dejar que los sueños te sueñen...
ResponderEliminarUn abrazo grande
¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10! ¡Ole, tengo un 10!
ResponderEliminarEscribir sobre instantes a veces queda bien, al menos nos hace pensar y la inspiraciónsiempre llega trabajando.
ResponderEliminarbesos.
yo acá en el umbral, guardándote el lugar, ya sabés.
ResponderEliminary escribiendo en mi teclado, yo acá en el umbral...
abrazo
Todos los comienzos comienzan así. Todos.
ResponderEliminarUn beso
Y el que te hayas sentado, frente al teclado, sin escribir nada, es un pasito, y no tiene nada que ver con olvidar, sino con atesorar los recuerdos y seguir adelante. Un beso.
ResponderEliminarClaro que si. A veces, es necesario gritar las impotencias.
ResponderEliminarY sin saberlo, sacó una sonrisa del otro lado de la pantalla...
ResponderEliminarSaludos,
Alejo Z.
Así pues, si que sabía que escribir? O no. No sé, dime dudoso.
ResponderEliminarUn saludo.
¿Ves?... te lo dije (lo digo por Jou) :)
ResponderEliminarMalena, quería comentar algo y me di cuenta que no se me ocurre nada, así que te lo digo un punto.
ResponderEliminarEn serio, es un gusto pasar por aquí y ver que hasta no sabiendo que escribir lo haces estupendamente.
Abrazos
Así empieza y así termina un magnífico microrrelato. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarMuchos besos,
Y a veces querida Malena, las palabras se amontonan tan desordenadamente que tampoco salen. Y se necesita, respirar, cerrar los ojos dejar que reposen en el corazón, donde antes o después terminan por ordenarse. Al menos a mí me pasa.
ResponderEliminarOtro beso
Miedo en blanco, terrible y sanguinario para el escritor.
ResponderEliminarBlogsaludos
...lo cual leyó y le produjo una satisfacción acorde (es decir, pequeña).
ResponderEliminarAbrazos desde la paciencia autoinfligida,
PABLO GONZ
hermoso esto, malena!
ResponderEliminarporque ademas, es como un triunfo: hago verbo mi silencio, porque es lo que quiero aun cuando no sepa como...
precioso.
beso grande y abrazo, que estes bien :)
Malena has escrito algo muy lindo... inspirada sin inspirarte
ResponderEliminarSí, me pasa igual (en respuesta al comentario del otro blog)
ResponderEliminarbesos
Antiqva:
ResponderEliminarLa Señorita C. es sabia, así que le haré caso.
Guille:
Niño Guille, pórtese bien o lo llevo a dirección, eh. :)
Claudia:
Escribir para mí es un ejercicio que me ayuda a sacar cosas de adentro. Y cuando no hay nada, también ayuda a enfrentar el vacío.
La inspiración va y viene, no?
Miralunas:
Sentaditas en silencio en el umbral. Yo sé que estás y no sabés cómo ayuda.
Marcelo:
Siempre se empieza desde la nada.
Brynhild:
Seguir. Primero forzando los pasos, hasta que salga naturalmente. Pero seguir.
Curiyú:
Hay que gritarlas y gritarles, perderles el respeto. Que sepan quien manda.
Alejo:
Y ahora que lo sabe, también sonríe.
Jou:
La realidad es que ella nunca sabe mucho de nada. Ni siquiera cuando parece que sabe.
Kum:
Es que vos siempre tenés razón. No lo dudo.
Anita:
Y es un gusto recibir tus comentarios. Sabés? A veces la palabra escrita no transmite la calidez que le queremos dar a las palabras. Yo espero que sepas que REALMENTE es un gusto recibirte en los suburbios.
Alice:
¡Gracias! A mi no me conforma mucho, jajajaja.
Carmela:
Eso es exactamente lo que me pasa. No es que no tenga nada que decir. Es que no sé por dónde empezar. Por eso .... calma .... hasta que salga algo.
Adivín:
¡Nunca blanco! Llenémoslo de letras, aunque no digan nada. :)
Pablo:
Pequeñas satisfacciones.
Hay otras más grandes, como la de verte por acá.
Lila:
Es un pequeño triunfo. Y hay que saborearlo también. Lo bueno siempre es bueno, aunque no sea grande.
Muchas, pero muchas gracias.
Lola:
Yo creo que se inspiró el teclado, no yo. :)
Gracias y bienvenida, Lola.
Lila:
ResponderEliminarViste que cuando nos levantamos con las heridas a flor de piel, sale el tango.
Perfecto. Entiendo. Aunque un dramatismo neurótico me invade y me pregunto el maldito para qué, y me agota, y dejo de escribir o, lo que es peor aún, me abandono a la tarea de olvidar hacerlo. Besos.
ResponderEliminarPerfecto el título.
ResponderEliminarBesos, Malena.
No sé bien quién dijo que todo escritor que se precie de serlo debe hablar de su aldea. Tu aperitivo literario me lo ha recordado. Gracias.
ResponderEliminarBuen día, yuyita.
Es un comienzo que se puede convertir en un bucle interminable.
ResponderEliminarUn saludo indio
Muuuy "borgeano" (¿adrede?).. Me encanta.
ResponderEliminarJavier:
ResponderEliminarNo nos hagas eso a los que te leemos! No dejes que te pueda el dramatismo neurótico.
Torcuato:
Pequeño título. Gracias!
Ramón:
Y, si. Es más fácil hablar desde espacios conocidos. Besos, perplejo.
No Comments:
Ay, esperemos que no! Pero, claro, podría.
A:
La falta de inspiración era tal que no se me ocurrió escribir algo borgeano. En realidad, no se me ocurrió nada. :)
Eso se llama un bucle... jaja
ResponderEliminarAl mejor estilo Cortázar en "Continuidad de os parques" mi cuento favorito... ;)
Es un bucle, claro.
ResponderEliminarPero si llego a parecerme a Cortázar haciendo algo me largo a llorar, me abatato y nunca más escribo una línea, jajajaja.
Empezar es el principio de una gran tarea.
ResponderEliminarAsí es, Manuel. La piedra fundamental es la más importante.
ResponderEliminarSi fueras Stephen King ya tendrías una novelas de 900 páginas con ese tema...
ResponderEliminarPor suerte hay una unica persona capaz de hacer algo semejantemente aburrido...
Suerte
J.