El chirrido de la puerta de entrada me avisó que ya estabas en casa. El reloj digital señalaba las 4:27 am. Pude adivinar que te sacabas los zapatos y la ropa en la habitación de al lado, aunque no hiciste ruido.
Te metiste en nuestra cama con sigilo, mientras yo simulaba dormir. Enseguida pude sentir el olor inconfundible que traes cuando estás con ella; una mezcla asquerosa de su perfume barato con el tuyo, sudor y cigarrillo.
A la mañana te pregunté por la reunión y me dijiste que había sido larga y agotadora. Sonreí comprensivamente.
Tomaste apurado el café antes de salir para la oficina y me preguntaste si necesitaba algo. Sin perder la sonrisa te dije que me dejaras plata, que iba ir al shopping con Laurita y ya había agotado el límite de la extensión de la tarjeta. Inmutable, llevaste tu mano al bolsillo del pantalón y sacaste la billetera.
Tan real y tan terrible como la vida misma... Tus palabras, amiga, suenan como cuchilladas en el aire...
ResponderEliminarEl texto resulta tan magnifico en la forma como terrible en su fondo...
Un abrazo, amiga
Antiqva:
ResponderEliminarTerrible y triste.
Eso no es vida, es una representación barata de la vida, no?
Siento en algún punto que tu blog y el mío se parecen, una de cal y una de arena; a veces pienso si es válido dejar post extremadamente dolorosos, (como el último mío) cuando la vida es bastante difícil de por sí. Y entonces, matizo, como vos. Por eso te decía que compartimos el mismo lápiz naranja.
ResponderEliminarDolorosa historia, donde cada palabra rasga el aire, con ese vaho de tristeza que traen consigo las reuniones laborales inexistentes.
Beso, compartiendo heridas.
No comprendo esa manera de soportar hasta la tortura. Qué perversidad hay en todo ello, o qué goce obtiene también la supuesta víctima? Pero ocurre más que seguido y todo se transforma en parodia, y nadie está exento. Besos.
ResponderEliminarQué tristeza la gente que debe "pagar" sus faltas con dinero... con lo simple que es ser directo y frontal. Además, hay gente que se valora tan poco que sin dinero no puede Ser...
ResponderEliminarExcelente relato, no lo podría haber contado mejor... a pesar que lo viví.
Abrazos.
No solo es válido; es necesario.
ResponderEliminarPorque no está bueno hundirse en el dolor, pero no hay que negarlo.
Porque sabemos que podemos reirnos A PESAR del dolor.
Porque largarnos a llorar a moco tendido libera, nos quita la opresión del pecho.
Porque reirnos hasta el hipo, cura.
Porque la vida es un combo desordenado de tristeza, amor, alegría, enojos, risa, perdones, soledad.
Porque la vida es una de cal y una de arena.
La historia duele. Creo que ella debería leer tu poema y pegar un portazo, en vez de ceder a esa transacción amarga.
Besos sanasanacolitaderana.
Javier:
ResponderEliminarYo creo que bien utilizás la palabra "supuesta". En estas relaciones no hay víctimas ni victimarios. Son trasacciones. Yo creo que ninguno gana.
Mai:
Ellos saldan culpas con dinero. Ellas gastan como una forma de venganza y para cubrir su ego lastimado con perfumes caros.
Hay alguien que quiero muchísimo, que mantuvo una relación así toda la vida. Te puedo asegurar que ninguno de los dos fueron felices.
Me encanta saber que saliste de esa situación.
HOLA LINDA
ResponderEliminarEl amor que sea porque si....
Las heridas se vuelven indignas....
¿Quien esta cavando la fosa de quien en esta historia?
Y cuando ya no haya dinero...¿Quien sera el moroso?
TE DEJO BESOS Y ABRAZOS, SIN TRANSACCION ALGUNA
STAROSTA
(UN PRODUCTO DE TU IMAGINACION)
¡Típico! ¿Por qué se actúa de esa manera? Nada de lo humano nos debe ser ajeno dicen los filósofos.
ResponderEliminarMe gusta tu prosa Malena
Y tu micro.
Un abrazo.
Y de esta forma conviven muchos hoy día.
ResponderEliminarMuchos como ese hombre, que poco saben fingir.
Y aquella mujer tan callada pero tan fuerte..
Me gustó mucho! estaré al tanto de tus publicaciones :)
Buenas Noches Male , antes de irme a la cama me di una vueltecita ....
ResponderEliminarA la mañana te pregunté por la reunión y me dijiste que había sido larga y agotadora. Sonreí comprensivamente.
Los 2 se mienten , ella sonríe comprensivamente y el la engaña descaradamente
Y donde esta el amor ???
Muchas ,mujeres sonríen falsamente porque prefieren sonreír que quedarse sin dinero , otras lo hacen por sus hijos , en estos casos me pregunto , porque ella sigue soportando y yo misma me contesto , solo ella lo sabe
Besos Male
Otro teatro más.
ResponderEliminarEste está muy extendido.
Besos.
Siempre un placer estar un ratito entre tus cosas... Pasa un feliz puente.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
El señor pagaba por silencio y ella cobraba.
ResponderEliminarUn día el silencio se termina, como todo lo que no se soporta.
Ese día empieza la vida.
Besos.
Starosta:
ResponderEliminarVaya preguntitas. Creo que diste en el clavo con ellas. El amor tiene que ser porque sí o es indigno. Tenés toda la razón del mundo.
Un abrazo.
Patricia:
Supongo que él se engañará pensando que quiere a las dos, y ella supondrá que él la quiere "a su manera".
Me halaga que te guste. Gracias.
Jess:
Ojalá ella sea lo sufcientemente fuerte para dejarlo, también.
Patricia333:
La sonrisa de ella es el pasaporte a la master y ella lo sabe. No creo que haya amor.
Toro:
Es parte de la farsa diaria, de la hipocresía generalizada. Una pena.
Hay otra forma de vivir.
La sonrisa de Hiperión:
Es un placer verte por acá.
Estoy en el medio de un puente. Espero que el traspaso de una orilla a otra sea feliz. (Supongo que vos te referís al fin de semana, pero yo no) :)
Pato:
Ese día termina la farsa y empieza la verdadera vida.
Cuando alguien demuestra un asco excesivo por el amor de pago, pienso que generalmente, de una manera u otra, todos pagamos. Aunque sea porque la extensión de la tarjeta quedó fusilada, o para no estar solos o por alguna de las mil maneras -sutiles o no- que tenemos a mano, rara vez podemos estar con alguien sin esperar nada a cambio.
ResponderEliminarPero... qué hermoso es cuando se da! No me des ninguna cosa, disfruto de tu compañía!
Un beso
PD: el gobierno de Perón fue alrededor de los años cincuenta. Qué años te parecieron los más importantes de aquel entonces?
Impotencia y dolor es lo que uno siente cuando el amor resulta infiel, una cosa esta muy clara, romper y empezar de nuevo, porque si no lo haces ahora lo haras mas adelante, el que es infiel lo es de por vida.
ResponderEliminares un gusto pasar a leerte.
que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.
Pasan estas cosas. comodidades. cobardías, terrores, beneficios de un lado o del otro, costumbres. Lo describiste muy bien y con pocas palabras. Probablemente en estos casos nunca hubo amor. ¿Estaré equivocado si digo que el amor no muere? Mueren las atracciones, las calenturas, los impactos encandilantes, qué sé yo, un montón de cosas, pero el amor me parece que no.
ResponderEliminarUn beso.
Marcelo:
ResponderEliminarMuchísimas relaciones son así: dar para recibir. Cuando hablamos de afecto, el trueque es válido, siempre y cuando no se caiga en manipulaciones baratas (¿Cómo no me vas a querer si yo te quiero tanto?).
Cuando la transacción es económica, es más fácil salir de ella mano a mano.
Na te debo,
na te pido,
me voy de tu vera
olvídame ya
que pagao con oro
tus carnes morenas
no maldigas paya
que estamos en paz.
Ricardo:
El que es infiel no te quiere, o te quiere mal. Entonces lo mejor es irte.
Tenés toda la razón.
Roberto:
El amor no muere. Yo estoy convencida de eso también. Se transforma, es cierto, pero no muere.
Hay algo que todavía se puede rescatar, cuando ella dice "Enseguida pude sentir el olor inconfundible que traes cuando estás con ella; una mezcla asquerosa de su perfume barato con el tuyo, sudor y cigarrillo" como si le asqueara esa relación, y tras eso, el irse de compras lo veo más como un remedio contra la depresión, muy utilizado entre mujeres que no se aprecian lo suficiente como par vivir independientemente.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho y lo siento muy real, de verdad...
Un abrazo
lo parió! duele leerlo!
ResponderEliminarbeneficios de la victimización, llaman a eso algunos que entienden poco. porque nunca es beneficio lo que te corroe el alma y te invisibiliza en el espejo, no?
besos, Piba.
Hahaha. "Así, ps sí".
ResponderEliminarHay cada tipo de "relación".
Me sorprende.
Un saludo, Malena.
Aguantar una infidelidad por una tarde de shoping....? vaya... que eso es quererse poco... :(
ResponderEliminarAnita:
ResponderEliminarElla sufre, sin dudas. Y para sanar el ego herido compra ropa o perfumes. Pero yo no rescataría nada de esa relación. A veces es mejor cortar por lo sano.
Miralunas:
Capitalizar el sufrimiento, si. ¡Como si hubiera dinero que pudiera calmar el dolor!
Un tipo:
Esas relaciones son baratas, a pesar de la extensiones de la tarjeta saturada.
Reina:
Es quererse muy muy poco. Para salir de estas relaciones hay que acrecentar el ego, primero.
Terrible texto y tan común como real en la vida. Todo se cubre con el dinero, pero sabés...el dinero provoca una forma de esclavitud actual que tiene un común denominador con la antigua esclavitud ya que esta es impersonal, donde no existe una relación entre el amo y el esclavo, te podrás imaginar donde queda la relación entre un hombre y una mujer que duermen en la misma cama.
ResponderEliminarIntersante, siempre me dejás pensando.
Un beso
Juan
Se respira extres, a mi no me gusta andar con prisar o sentirme agobiado.
ResponderEliminarTan solo pasaba y decidi dejar mi huella.
Un saludo.
Juan:
ResponderEliminarEn estas relaciones son ambos esclavos de sus decisiones. Él decide seguir fingiendo reuniones y nunca se animará a ser del todo libre, y ella decide seguir fingiendo creele, esclavizándose a cambio de estatus (no solo económico, sino social. Seguir siendo "la Señora de ...").
Me parece a mi, claro. Pero cada pareja es un universo.
Unai:
A nadie le gusta, solo que a veces la vida nos hace llevar ese ritmo.
Gracias por dejar tu huella por acá.
Comparto, en la totalidad lo que has escrito, pero a eso agregale dinero...
ResponderEliminarRepito, interesante.
Beso
Juan
no pensé q viraría para ese lado aunque el título lo avisaba.
ResponderEliminarBuena secuencia mujer!
Juan:
ResponderEliminarMe acordé de esta canción de Serrat:
Uno por uno,
cada billete
que ganaré,
devotamente
por las dos caras
lo besaré
y así cuando le lleguen
noticias mías
se juntarán mis besos de amor
con sus besos de alegría.
Ay, dinero, dinero, dinero
dinero vil metal…
Mensajes de amor de curso legal.
Efa:
Gracias. Y si, el título fue buchón.
Cuántos amores son, en realidad, transacciones. Aunque no hubiere dinero de por medio... cuántos!!!
ResponderEliminarUn placer leerte, Malena.
Un beso... gratis y desinteresado.
Son pocos los amores genuinamente desinteresados. Pero que los hay, los hay.
ResponderEliminarGracias por detenerte en un viejito :)
Dos besos (te ganaste el interés).